Consejos naturales para terminar con las ojeras
¿Sabes a qué se llama hipercromía idiopática del anillo orbitario? Es lo que comúnmente llamamos ojeras y que independientemente de que le demos un nombre difícil o común siempre son indeseadas y antiestéticas. Las ojeras son el resultado de la producción de melanina en exceso y de la dilatación de los capilares contiguos a la superficie de la piel. Lo cierto es que la frustración que sentimos cuando nos levantamos y notamos nuestros ojos inflamados u ojerosos es equivalente a la cantidad de corrector de ojeras que debemos utilizar para tratar de disimularlas.
Si bien se asocian a una noche de insomnio o al cansancio excesivo, muchas veces no responden a ninguno de estos dos motivos. La piel de este sector es extremadamente sensible y al ser la más fina del cuerpo se evidencia rápidamente cuando se distiende.
Pero te vamos a enseñar algunos trucos caseros que podrás utilizar para eliminar rápidamente esta sombra oscura bajo tus ojos y al mismo tiempo disminuir la inflamación.
Agua de rosas:
Si bien puedes encontrarla a la venta en algún herbolario también puedes prepararla de manera casera y fácil. Hierve en agua un puñado de pétalos de rosa, cuélalos y guárdalos en el refrigerador por hasta 1 semana.
El agua de rosas hidrata la piel, nutre, reduce la hinchazón y el enrojecimiento. También contribuye a mejor la apariencia de la piel devolviéndole su brillo y rejuveneciéndola.
Modo de uso:
Humedecer dos trozos de algodón en el agua de rosas y cubrir la zona de los ojos durante 15 minutos. Repetir el procedimiento por la mañana y por la noche hasta notar resultados visibles.
Aceite de almendras dulce:
Reduce la inflamación y da tonicidad a la piel. Aplica una gotitas en la zona de ojeras y masajea suavemente con las yemas de los dedos antes de ir a dormir.
Mascarilla de pepinos:
El pepino contiene sustancias que rejuvenecen la piel y la revitalizan. También contiene propiedades blanqueadoras que pueden revertir el bronceado.
Modo de uso:
Cortar un pepino en rodajas y conservarlas en el refrigerador por espacio de media hora. Cuando estén bien frías cubre con las rodajas los ojos, cuidando en especial la zona de ojeras. Dejar actuar durante 15 minutos y lavar con agua fresca. Repetir el tratamiento durante 1 semana.
Mascarilla de pan y leche:
La leche le da tonicidad a la piel y reduce el enrojecimiento y el pan con alto contenido de levadura y vitamina B reduce la inflamación.
Modo de uso:
Preparar una masa blanda con pan y bastante leche, formar una máscara y aplicarla sobre los ojos y ojeras durante 10 minutos. Lavar con agua fría. Repetir una vez al día.
Hierbas y hielo:
El frío de por sí, siempre es saludable para la piel. Le da elasticidad, afina las arrugas y reduce la inflamación. Utiliza hielo con hierbas medicinales para tratar las ojeras. Sólo necesitas salvia, flores de manzanilla y perejil.
Modo de uso:
Desmenuza cada hierba y vierte agua hirviendo. Dejar que las hierbas desprendan sus jugos por unas dos horas mientras se enfría. Cuando esté a temperatura ambiente, distribuye en cubeteras (moldes para hielo) y llévalos al congelador.
Por la mañana, coloca un cubito en cada ojo durante 30 segundos y repite durante 15 días hasta notar resultados.