Los niños que caminan descalzos son más inteligentes y felices
Y tus hijos, ¿caminan descalzos?
En la actualidad, la mayoría de los niños usan zapatos prácticamente desde que nacen. Ya sea porque así lo manda la moda o simplemente porque a los padres les preocupa que enfermen, lo cierto es que los niños cada vez andan menos descalzos. Sin embargo, lo que muchos padres desconocen es que los pequeños que van descalzos no solo son más felices sino que también desarrollan mejores habilidades cognitivas.
Ir descalzos estimula la inteligencia infantil
Un estudio realizado por expertos de la Universidad Complutense de Madrid encontró que andar descalzo con frecuencia en la infancia estimula la maduración de algunas de las funciones cognitivas, a la vez que fomenta el desarrollo propioceptivo y mejora el rendimiento intelectual. En práctica, los pequeños que van descalzos con frecuencia maduran más rápido en comparación con sus coetáneos que siempre llevan zapatos.
Los científicos explican que esto se debe al contacto directo de los pies con el terreno, un mecanismo natural que favorece la transmisión de información propioceptiva al cerebelo, desde donde parten distintas vías aferentes que intervienen en el control del equilibrio y el mantenimiento de la postura. Es la forma que tiene el cerebro de conocer en cada momento las posiciones de todas las partes del cuerpo, así como la dirección y velocidad de los movimientos.
Sin embargo, en lo que no se había reparado hasta hace poco es en el hecho de que la transmisión de información propioceptiva al cerebro estimula la mielinización de las dendritas de las neuronas, lo que a su vez favorece el control neuromuscular y el desarrollo intelectual y social de los niños.
No obstante, este no es el único estudio que destaca las ventajas de ir descalzos. Otra investigación, esta vez realizada por científicos de la Universidad de Bournemouth, descubrió que los estudiantes que están descalzos en el aula tienen un mejor rendimiento académico, en comparación con aquellos que se mantienen usando zapatos en el colegio.
Para arribar a estos resultados, los investigadores analizaron a miles de niños de 25 países diferentes durante un período de más de 10 años. Los expertos encontraron que cuando los alumnos se quitaban los zapatos para estar en clase se mostraban más interesados en las enseñanzas del profesor, estaban más dispuestos a participar en las actividades escolares y tendían a llegar más temprano e irse más tarde, un signo de motivación.
Los expertos consideran que esto se debe a que quitarse los zapatos hace que los niños se “sientan como en casa” y se relajen, lo cual les permite abrirse al aprendizaje, de manera que aprenden más rápido y obtienen mejores calificaciones.
Otras ventajas de dejar que tus hijos anden descalzos por casa
1. Favorece el desarrollo de los pies
Se ha demostrado que el uso temprano y continuo de los zapatos obstaculiza el adecuado desarrollo de los dedos de los pies, a la vez que afecta la pisada natural y acorta los músculos y tendones de la parte posterior de las piernas. En cambio, ir descalzos con frecuencia permite que los pies crezcan de forma saludable, lo que repercutirá favorablemente en la estabilidad y el desarrollo motor de los niños.
2. Mejora la postura corporal
Se ha demostrado que el uso de zapatos desde una edad temprana puede afectar la posición natural de la columna vertebral, incrementando el riesgo de aparición de alteraciones posturales a largo plazo. Este problema se puede prevenir yendo descalzos ya que de esta forma los niños no necesitan bajar la cabeza para mirar por dónde caminan, lo cual favorece el adecuado desarrollo de su columna.
3. Estimula las emociones “positivas”
Se ha comprobado que ir descalzo es un ejercicio excelente para liberar las tensiones y fomentar la relajación. También estimula la sensación de libertad, lo cual hace que los niños se abran más a las experiencias que le rodean y se sientan más seguros de sí mismos.