Ocho razones por las que las personas calladas suelen ser más listas

 
Ocho razones por las que las personas calladas suelen ser más listas

No es casualidad que la gente más inteligente hable menos que el resto.

¿Recuerdas aquel chico callado de clase? Probablemente pienses que no hablaba mucho por qué era demasiado vergonzoso. Pero, ¿y si era por qué era tan listo que todo lo que decían los demás le parecían obviedades?

Un usuario de Quora ha lanzado la pregunta: "¿Por qué las personas más listas suelen ser las más calladas?", y varios usuarios han compartido sus opiniones al respecto. A partir de ellas podemos extraer una serie de conclusiones que nos pueden ayudar a entender a las personas que prefieren mantener la boca cerrada. Incluido ese chico callado de la clase.

1. Cuando no se habla, se aprende mucho más.

Hablando materializas tus pensamientos en palabras con el objetivo de que tus interlocutores te entiendan, y eso puede hacerte aprender. Sin embargo, el aprendizaje de escuchar, ver y analizar lo que ocurre a tu alrededor es mucho mayor, tanto a corto como a largo plazo.

2. Los debates y discusiones suelen ser poco productivos.

En función de los que participan en éste y de el tema que se trate, una discusión puede resultar una experiencia tremendamente confusa. En muchas ocasiones, cuando una persona no hace el mínimo esfuerzo para participar es porque sabe que no suelen aportar resultados.

3. La mayoría de gente es aburrida.

Las conversaciones triviales y ordinarias pueden no generar ningún interés en las personas más listas, por lo que no hacen el mínimo esfuerzo para participar en éstas.

Cuando una persona no hace el mínimo esfuerzo para participar en un debate es porque sabe que no aportan resultados

4. Serenidad como muestra de seguridad.

La delicadeza y la tranquilidad están universalmente asociadas a la seguridad. Si pudiésemos ver la electricidad en los cerebros de personas muy inteligentes, raramente encontraríamos grandes picos y valles. Estos altos y bajos erráticos son demasiado poco eficientes.

5. Cuanto más tiempo para pensar, mejor.

Ante un problema, una mente callada y tranquila suele generar mejores ideas para solucionarlo. Todos necesitamos tiempo para tomar las decisiones apropiadas, pero las personas más listas suelen hacer un uso más eficiente del mismo.

6. A veces, hablar es perder el tiempo.

Hay personas que prefieren no derrochar su tiempo en explicar algo que el resto no entendería, por lo que prefieren guardárselo para ellos mismos.

7. El silencio puede ser un placer.

Algunas personas no soportan el silencio, de hecho, puede ser una experiencia extremadamente incómoda. En cambio, a los que se les considera más listos lo disfrutan, ya que no necesitan que los demás les ayuden a entender las cosas.

8. Callar para analizar.

Para entender el entorno y las personas que le rodean es necesario mantener silencio para, así, averiguar en que línea de pensamiento se mueven los demás y saber cómo dirigir la información.